El día 16 junio leo una noticia en yahoo de la agencia EFE, “El huerto de la Casa Blanca da sus frutos". Pensando que podía ser una interesante noticia de economía, en la que las medidas económicas de la Casa Blanca ya estaban dando sus frutos, leo con atención el primer párrafo que dice textualmente, “La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, recogió hoy los frutos del huerto que plantó hace dos meses con un grupo de alumnos de una escuela de Washington, con quienes cocinó las hortalizas y verduras en la cocina de la Casa Blanca.
Sigo leyendo la noticia, para descubrir que al final las hortalizas acaban acompañando un pollo, el cual una vez cocinado, sirvió de sustento tanto a los escolares como a la primera dama.
Y mientras disfrutaban recogiendo y comiendo los frutos de la huerta, la primera dama repartía consejos a los muchachos.
Lo que yo me preguntaba sería que consejos daría la primera dama de la economía más desarrollada del mundo. Quizás les pudiera decir, que mientras en muchos países del tercer mundo o en vías de desarrollo se produce a precios irrisorios, luego los intermediarios que controlan la distribución obtienen ingentes beneficios por su intermediación. También les puede aconsejar como funciona el mercado de materias primas de Chicago donde se puede especular con materias primas, que en ocasiones al igual que las acciones se pueden comprar con créditos de bancos, alterando su precio y obteniendo importantes plusvalías.
También me acordaba de los ya famosos “brotes verdes”, frase celebre que pasara a la historia de esta crisis, y me preguntaba si la huerta de la casa blanca es más fértil que la huerta española, ya que en esta los frutos se recogen a los dos meses y en la española tardaran dos años.
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